Localidad marinera de singular fisonomía a causa al monte de San Antón, más conocido como “el Ratón”, Getaria es un bello pueblo marinero muy cuidado y que merece la pena conocer. Sobresale su casco antiguo con todo el sabor de los pueblos vascos del litoral. Se encuentra a menos de 20 kilómetros de San Sebastián.
Es uno de los puertos, pesquero y deportivo, más dinámicos de Guipúzcoa y cuenta con una notable dotación hostelera en la que destacan los afamados asadores de pescado.
En el casco urbano, en un empinado descenso hacia el puerto por la Calle Mayor y después de cruzar por un pequeño túnel, se contempla una de las más hermosas manifestaciones del gótico vasco: la iglesia de San Salvador.
En este lugar, se reunió la Junta General de 1397 que dio lugar a la provincia de Guipúzcoa. Este templo, que en 1420 ya estaba levantado, presenta una planta irregular a causa ia de la adaptación al terreno y dos torres, una de ellas desmochada y denominada como la torre de la Inquisición.
El callejeo por las calles Mayor y San Roque posibilita ver un buen número de construcciones civiles de interés, entre las que sobresale la casa barroca de Larrunbide y llegar hasta el puerto y el Ratón, donde se obtiene una panorámica que abarca bastante de la costa guipuzcoana. Fuera del casco antiguo, en el barrio de Askizu, está la iglesia protogótica de San Martín.
Por otro parte, en Getaria vino al mundo Juan Sebastián Elcano. En 1922 se construyó un monumento en su honor donde cada cuatro años, el 6 de agosto, se celebra una fiesta conmemorativa que arranca en el puerto y concluye en el monumento, con una corte improvisada del emperados Carlos I.
Finalmente, otra de las construcciones más destacadas de Getaria es el palacio Aldamar. En este sitio, se ubica la Fundación Balenciaga y el Museo dedicado al modisto que abrió en 2007 gracias un un proyecto urbanístico de formas aéreas y volúmenes suspendidos inspirado en la obra de Balenciaga y su tendencia a sentir sus creaciones como reflejos de otras artes.