Ávila
Ávila es una maravillosa ciudad de Castilla-León ubicada a 1.131 metros de altitud, en un promontorio rocoso a la orilla derecha del río Adaja. Ávila es conocida porque Santa Teresa de Jesús nació aquí, por sus murallas, sus conventos, sus iglesias, su casco histórico (Patrimonio de la Humanidad por la Unesco desde 1985) y su sabrosa gastronomía.
Las Murallas son uno de los recintos amurallados mejor conservados del planeta y el símbolo de Ávila por antonomasia. Con, cerca de dos kilómetros y medio de perímetro y 88 torreones, datan de 1099, si bien se aprecian retoques en distintas épocas.
En Las Murallas, sobresalen las puertas del Alcázar y San Vicente. En ella un arco descansa sobre dos torreone. Sobre la puerta del Carmen se sitúa una preciosa espadaña. La parte más antigua se corresponde con la puerta del Mariscal. La mejor panorámica de las murallas se obtiene desde el paraje de los Cuatro Postes junto a la carretera de Salamanca.
También hay que ver la Casa Natal de Santa Teresa de Jesús. La casa donde vió la luz Santa Teresa fue después convertida en iglesia con convento de clausura adjunto en el siglo XVII. Presenta una fachada neoclásica con imagen de la Santa en un lugar destacado.
Asimismo, el turista debe visitar la Catedral de Ávila. Data de la segunda mitad del siglo XII y se rige según los cánones románicos, mas la obra fue concluida en el siglo XIV en estilo gótico. Así, ambos estilos, con algún retoque mudéjar, se hermanan en este templo. Destacan la tumba de Alonso de Madrigal, el retablo mayor, el coro de madera, el museo y la custodia de Juan de Arce.
También, Ávila es una localidad repleta de iglesias notables como la de San Vicente, la de San Pedro y la de San Andrés. Otros edificios religiosos que hay que ver son el Real Monsaterio de Santo Tomás, el convento de San José y el Santuario de Nuestra Señora de Sonsoles.
Finalmente, recomiendo degustar y disfrutar la gastronomía recia abulense, cuyos máximos exponentes son las carnes y las legumbres (judías de El Barco). Sin olvidarnos de sus famosas Yemas de Ávila, una joya para los más golosos.
