Vegadeo es un precioso concejo del Principado de Asturias, una parroquia de dicho concejo y una villa de dicha parroquia. La villa de Vegadeo es la capital del concejo. Sobresale como la última localidad del occidente asturiano y hasta hace poco tiempo era paso obligado en la ruta hacia Galicia. Además, se habla eonaviego (o gallego-asturiano).
Plantada en el comienzo de la ría del Eo, que permite la navegación de cabotaje, en una comarca de suaves ondulaciones y bellos coloridos, Vegadeo tuvo épocas de mayor relevancia, por su condición de paso obligado entre Galicia y Asturias.
La construcción del puente sobre el río Eo hace más de veinte años afectó en un primer momento al flujo de viajeros por Vegadeo, con la necesaria reconversión hacia otras ocupaciones, enter las que pronto asumió la de cabeza de una comarca que conserva su tradición mercantil, consolidada por su notable Feria de Muestras.
La prosperidad que tuvo en el siglo XVIII dejó por toda la comarca bastantse casas blasonadas. Entre éstas destacan el palacio de Meredo, la casa de Lastra, en Vijande; casas de Rego y La Corredoira, en Piantón; casa Villamial, casa de El Campo, palacio de Valledor y casa de Parga, en La Villa; cas de Trabadelo en Miou; castillo medieval en Abres y casa de Valentín de Castro, en Calle Palacio.
Por otra parte, Vegadeo es un buen destino para tapear, sobre todo los sábados, día del mercado. Callos con garbanzos, pulpo, bollos preñaos, sardinas, hígado encebollado, etc. lucen en las barras de los bares. También hay que probar las truchas, reos y el salmón.
Ademas, en Vegadeo se trabaja en el mercado hojalatero orensano, y pueden hallarse madreñas, cestos de mimbres y cencerros par las vacas. Incluso hay tradición de forja. Asimismo, se pueden encontrar navajas de Taramundi o de Aguillón.
Finalmente, en los alrededores de Vegadeo hay visitar Abres donde se reúnen los pescadores, con bellos monumentos como el palacio de los Milán del Bosch, la iglesia de San Tirso y la iglesia parroquial.