Menorca, un icono de la cultura megalítica

MENORCA MEGALITICOAdemás de una serie de características físicas que diferencian a Menorca del resto de las islas Baleares, el desarrollo hace unos 4.000 años de una cultura megalítica propia le ha dado un valor arqueológico único en el mundo. Si los talayots, dólmenes o cromlechs encuentran sus réplicas en muchos lugares, las taulas sólo se levantan  en la isla de Menorca.

Las taulas están compuestas por dos grandes bloques de roca caliza que conforman una “T” , existen más de veinte diseminadas por los rincones más bellos y  misteriosos de la isla y las mayores pueden pesar más de veinticinco toneladas. El fin de las taulas no se conoce todavía, así a  lo largo del siglo XX se han dado diversas teorías.

Las taulas más importantes son la de Torralba d’en Salort, en la carretera de Alaior a Cala en Porter; la preciosa Talatí de Dalt, en la carretera de Mahón a Alaior; Torre Llafuda, en un singular paraje entre Ciudadela y Ferrería; Trepucó, al lado de Mahón; la que se alza en el centro del poblado prehistórico de Torre d’en Gaumes entre Alaior y Son Bou; Torre Llisa Vell, al sur de Torralba; Binimaimut y Torre Trencrada.

Por otro lado, los tayalots son torretas en forma de tronco de cono que se levantan vigilantes sobre ligeras elevaciones del terreno. Los tayalots más relevantes son los Torre Llafruda y Trepucó;  Torre d’en Gaumes, en el poblado prehistórico; Torelló, Curnia y Talatí, cerca de Mahón.

Por su parte, las navetas son construcciones de piedra en forma de casco de navío en posición invetida y podían tener un  función de enterramiento. La más destacada es la Naveta de Es Tudons, a un lado de la carretera principal muy cerca de  Ciudadela  y levantada hacia el año 1.400 antes de Cristo. Otras navetas notables son las de Binimaimut, Rafal Rubí, Llumena, Biniac y San Morell.

Finalmente,  en Menorca existen varias decenas de cuevas o necrópolis de los siglos IX y VII antes de Cristo. La agrupación más espectacuar puede visitarse en Cale Croves.